Los altos mandos de las policías municipales deben
darse a personas honorables, de confianza para la sociedad, por lo que los
alcaldes que quieran tener a alguien de su gente en esos puestos en lugar de
otro que ha sido evaluado y aprobado, tiene que someterlo a la evaluación
correspondiente, sostuvo el director general del Centro Estatal de Control de Confianza,
Pedro López Ayanegui.
Precisó
que hasta estos momentos solamente han solicitado se evalúe a sus nuevos mandos
de las policías, los alcaldes de Tapachula, Tuxtla Gutiérrez, Comitán y San
Cristóbal de Las Casas.
Reveló
que se ha pedido el apoyo al Congreso del Estado para exhortar a los alcaldes
en turno que manden a evaluación a su gente, a efecto de saber en quién recae
la responsabilidad de la seguridad pública.
López Ayanegui
explicó que a solicitud de las dependencias y organismos proceden hacer las
evaluaciones al personal sujeto, con la presencia de Derechos Humanos,
inclusive hasta llegar a la conclusión de lo que tiene que ver con poligrafía,
psicología, entorno económico, médico y toxicológico, para su aprobación o no
aprobación.
Con
los resultados otorgados son los titulares de cada dependencia los que optan
por reubicarlos, debido a las condiciones que presenta el elemento, es decir no
reúne el perfil de confianza.
Reconoció
que hay quienes se molestan porque por esa situación algunos policías han sido
dados de baja en sus puestos, pero eso también es cuestión de cada persona por
no portarse bien.
Si el
pueblo confía en que tenemos gente valiosa en los cuerpos de seguridad, que lo
demuestren los elementos y tengan conductas dudosas porque tarde o temprano
tendrán ahora que pasar para ser evaluados.
Dejó
en claro que el Centro Estatal de Control de Confianza no se ha convertido en
ser el que señale ante las nuevas autoridades municipales quiénes son los
policías que aprobaron y cuáles no; eso lo ven al revisar sus documentos.
En
tanto, sugirió a los nuevos Ayuntamientos que conserven como servidores
públicos a los policías que han sido evaluados y aprobados. Hay que aprovechar
este recurso humano en el cual el Estado ha invertido y puede ser de gran
utilidad para la seguridad pública. ASICh