Por primera vez el
Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Chiapas (CECyTECH)
obtuvo el pase para competir a nivel internacional con el proyecto Papayañuelos,
que son nutritivas y deliciosas galletas a base de papaya, fruta de la cual
Chiapas es uno de los mayores productores del país.
El premio lo ganaron en la Expociencia
Nacional 2012, que se realizó en Puebla, Puebla, donde se hicieron acreedores
al segundo lugar en la categoría de agropecuarias y alimentos, que les
permitirá asistir a Turquía a la Olimpiada Internacional de Proyectos de Medio
Ambiente.
Por tal motivo, los directivos
expresaron su entusiasmo y reiteraron el compromiso de respaldar las
actividades que realizan los jóvenes de este subsistema educativo.
Bianca Iridian Valencia López,
Palmyra Gómez López y Jesús Montoya López, estudiantes de la especialidad de Análisis
y tecnología de alimentos del CECyT La Independencia, asesorados por Jaime
Ernesto Náfate, son los creadores y orgullosos ganadores.
En la Expociencia nacional 2012, el
CECyTECH presentó dos proyectos en la categoría de medio ambiente: “Aprovechamiento
del mucílago del café para la producción de bioetanol”, a cargo de los alumnos
del CECyT Bella Vista y la “Sembradora de precisión semiautomatizada”, del
plantel Benemérito de las Américas. Evento en el cual estuvieron apoyados por
Juan Paulo Ruiz Flores, director de Vinculación.
Sobresalió el alto nivel de
competencia, ya que la Expociencia reunió a 1500 estudiantes con 450 proyectos
que representaron a los 31 estados del país y a naciones como: Portugal,
Uruguay, Italia, República Checa, Kuwait, Turquía, Colombia, Brasil, Rusia y
Paraguay.
Es importante destacar que el pasado
mes de septiembre, el plantel 24 Benemérito de las Américas, obtuvo el primer
lugar en el XI Concurso Nacional de Creatividad Tecnológica realizado también en la ciudad de Puebla, donde
participaron alumnos de 28 estados del país.
El prototipo “Sustrato de Turba
Vegetal Enriquecida con Harina de Pescado”, fue ganador en la categoría de
proyectos tecnológicos, siendo la primera vez que se obtiene este
reconocimiento a nivel nacional.
La harina a base de pez diablo (plecostomusspp),
por su alto valor nutritivo, combinada con turba vegetal, produce un abono para
plantas y mezclada con maíz es un alimento de calidad para aves; además tiene
un alto impacto ambiental, ya que el pez diablo es una amenaza para la
biodiversidad de la Selva Lacandona, porque es un depredador que pone en
peligro a otras especies.